Shiatsu

El Shiatsu es un sistema para el cuidado de la salud por medio del tacto nacido en Japón. Bajo la influencia de la sabiduría China junto con los más recientes conocimientos occidentales, las raíces teóricas y prácticas del Shiatsu provienen de la filosofía y de las antiguas tradiciones orientales de curación así como de la concepción holística de la vida y la salud basada en ellas. Su objetivo es estimular y apoyar los procesos naturales de autocuración, bienestar y crecimiento personal, y mantener la salud buscando el equilibrio de la energía vital de la persona, energía que sostiene todas las actividades del cuerpo, de la mente y del espíritu.

El tratamiento se basa en la aplicación de presión, trabajo energético y físico sobre los canales (meridianos) y sobre puntos para equilibrar la circulación de la energía vital (Ki). Un método de manipulación del cuerpo que nos permite dar y recibir atención, energía y curación mediante un contacto no invasivo.

El espíritu del Shiatsu es la comunicación mediante el contacto.

  • Para recibir Shiatsu no hace falta padecer ninguna enfermedad. Los resultados de la investigación sobre la experiencia del Shiatsu y sus efectos, demuestran que entre el 39% y el 59% de las personas que eligieron acudir al Shiatsu lo hicieron para mantener su estado de salud.

    Los receptores aportaron las siguientes razones principales para recibir Shiatsu:

    • Problemas músculo-articulares.

    • Problemas de estructura corporal, dolor de espalda o posturales.

    • Relajación y alivio de tensión y estrés.

    • Baja energía o cansancio.

    • Problemas digestivos, respiratorios o de la tensión sanguínea.

    • Dolor menstrual.

    • Apoyo emocional.

    • Desarrollo personal.

  • En la primera visita, elaboramos tu historial de salud y de estilo de vida, teniendo en cuenta las necesidades que te han llevado a acudir a la consulta y cualquier otro síntoma que puedas tener. El tratamiento se recibe con ropa cómoda, acomodados en el futón acolchado en el suelo (o adaptados a silla o camilla en caso de que fuera necesario). Esta primera sesión tendrá una duración 1h y media, el resto de sesiones normales durarán 1h.

    Comenzaré a aplicar una presión prolongada con los dedos, el pulgar o las palmas de las manos, para soltar y restaurar el flujo de energía, conocido como ki o chi, por el cuerpo. También se utilizaré rotaciones y estiramientos para soltar y facilitar el flujo libre de la energía, la sangre y la los líquidos corporales.

  • La conclusión principal del estudio paneuropeo es que: Después del Shiatsu te sientes más calmado/a y relajado/a, pudiendo experimentar una mejoría con respecto a una amplia variedad de síntomas.

    En la investigación de la FES, entre el 94% y el 95% de las personas receptoras dijeron que se sentían más calmadas y relajadas después del Shiatsu. Tanto los receptores que lo experimentaban por primera vez como los receptores habituales, expresaron sensaciones de estar fisicamente más ágiles, más energéticos, más equilibrados o más capaces de encarar las vivencias de nuestra propia vida. Entre el 54% y el 60% de los/as clientes/as habituales de Shiatsu notaron una mejoría en su calidad del sueño.

    Durante la Investigación de 6 meses de duración, los síntomas de las personas participantes se redujeron significativamente y estas mejorías se mantuvieron en el tiempo. Al finales de la Investigación, entre el 85% y el 89% de las personas afirmaron que el Shiatsu había sido efectivo en el tratamiento de sus síntomas.

    Los síntomas de tensión y estrés son los que mejoraron más, seguidos de los problemas musculares, de estructura corporal, dolores de espalda y articulaciones, baja energía y cansancio, así como problemas digestivos, de la menstruación y respiratorios.

    Más del 90% de las personas usuarias regulares del Shiatsu apiñaros que este les había ayudado a mantener su salud. Tanto los receptores nuevos como los habituales se sentían más conscientes de sí mismos y con mayor capacidad para afrontar dificultades, así como más conectados a sus emociones. Después de tan sólo 3 meses recibiendo Shiatsu, todas las personas expresaron “más confianza en que mis problemas puedan ser superados”.

  • El Shiatsu te puede ayudar a adoptar una actitud más relajada, sana y equilibrada hacia la vida.

    Durante las sesiones te podré ofrecer consejos en cuanto a ejercicios, mejora de dieta o reducción de estrés en tu vida.

    Entre el 73% y el 80% de las personas usuarias de Shiatsu afirmaron que se habían producido cambios en sus estilos de vida como resultado de las sesiones recibidas. En la investigación, muchas de las personas opinaron que el Shiatsu les ayudaba a buscar el tiempo necesario para descansar, relajarse y hacer ejercicio, así como les proporcionaba unas pautas para mejorar su dieta. entre el 43% y el 64% de las personas participantes dedicó más tiempo de lo habitual al ejercicio físico.

    Al final del estudio, entre el 16% y el 22% de las personas habían reducido el uso de medicación convencional y entre el 30% y el 41% había optado más por la medicina complementaria y alternativa.

  • Entre el 86% y el 96% de las personas participantes afirmaron que el Shiatsu cumplió sus expectativas o incluso fue más allá de las mismas.

    Como el Shiatsu es un tratamiento holístico, se pueden experimentar algunos efectos inesperados, sin que ello afecte a la seguridad del receptor, como cansancio o aumento temporal de los síntomas: estos efectos son transitorios, pues rara vez duran más de dos días, tras los cuales se suele percibir una reducción de dichos síntomas y una mejoría.

    Al final de la investigación, entre el 84% y el 97% de todas las personas expresaron su plena satisfacción con su experiencia del Shiatsu.

Quiero saber más sobre el Shiatsu…

Las siguientes preguntas y respuestas se basan en una investigación realizada por la Federación Europea de Shiatsu (FES) del Proyecto de Investigación Europeo sobre la experiencia del Shiatsu y sus efectos.